“...Estos muchachos son como unos hijos míos, uno los ve crecer y con ellos vive parte de su vida...”. Las palabras que Diomedes Díaz Maestre pronunció a la mitad de camino entre el principio y el final del concierto que dio el pasado domingo 18 de agosto en Mesitas de El Colegio, Cundinamarca (Colombia) las personalizó para alguien que en estas épocas de madurez musical conoce más de cerca y mejor sus andares: Diego Martínez Salazar, el hermano de su actual compañera Consuelo y tío de los hijos del artista: Carmen Consuelo, Katiuska y Fredi José.
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| Diomedes y su cuñado, Diego Martínez. (Foto: Héctor Sarasti). |
“...Estos muchachos son como unos hijos míos, uno los ve crecer y con ellos vive parte de su vida...”.
Las palabras que Diomedes Díaz Maestre pronunció a la mitad de camino entre el principio y el final del concierto que dio el pasado domingo 18 de agosto en Mesitas de El Colegio, Cundinamarca (Colombia) las personalizó para alguien que en estas épocas de madurez musical conoce más de cerca y mejor sus andares: Diego Martínez Salazar, el hermano de su actual compañera Consuelo y tío de los hijos del artista: Carmen Consuelo, Katiuska y Fredi José.
Las palabras que Diomedes Díaz Maestre pronunció a la mitad de camino entre el principio y el final del concierto que dio el pasado domingo 18 de agosto en Mesitas de El Colegio, Cundinamarca (Colombia) las personalizó para alguien que en estas épocas de madurez musical conoce más de cerca y mejor sus andares: Diego Martínez Salazar, el hermano de su actual compañera Consuelo y tío de los hijos del artista: Carmen Consuelo, Katiuska y Fredi José.
Lo cierto y comprobable es que Martínez Salazar anda para un lado y para otro con él tanto que es más fácil que se le separe la sombra al artista que Diego no esté junto a el más famoso cantante vallenato de todos los tiempos, entre otras cosas, porque es su asistente personal y está siempre ahí para darle un apoyo o como dice el vulgo, "lo mismo está para un roto que para un descosido".
Diego es un bogotano, padre de tres hijos (dos niñas y un joven) que está la mayor parte del tiempo ayudando al cantante. Dicho sea de paso, Díaz Maestre y su propia hermana son sus padrinos de boda, algo que lo enorgullece.
No es raro verlo en la tarima convertido en un Arnold Schwarzenegger o en un "Hombre Increíble (Hulk)" espantándole a cuanta persona se extralimita en su amor al Cacique de La Junta: aquel besucón que le da por darle un abrazo al cantante, a la fan que se encarama para demostrarle su aprecio; al amigo de no sé quien que le dice “que Diomedes es mi llave” o que “El Cacique es primo-hermano de la mujer del mocho” y cuanta persona le da por saltarse los límites normales con una creatividad que, en no pocas veces, raya en la locura.
Tampoco es raro verlo a lo Vittorio & Luccino, hecho el modisto escogiendo que ponerle de ropa a su cuñado para la presentación o buscando de prisa y corriendo quién le planche de última hora una camisa al artista en algún pueblo remoto y dejado de la mano de Dios.
Y ni se diga cuando llega a un aeropuerto y debe estar al tanto del equipaje del más grande del vallenato. Su delgadez contrasta con los ingentes y oficiosos esfuerzos que hace para que las cosas salgan lo mejor posible.
No es raro verlo en la tarima convertido en un Arnold Schwarzenegger o en un "Hombre Increíble (Hulk)" espantándole a cuanta persona se extralimita en su amor al Cacique de La Junta: aquel besucón que le da por darle un abrazo al cantante, a la fan que se encarama para demostrarle su aprecio; al amigo de no sé quien que le dice “que Diomedes es mi llave” o que “El Cacique es primo-hermano de la mujer del mocho” y cuanta persona le da por saltarse los límites normales con una creatividad que, en no pocas veces, raya en la locura.
Tampoco es raro verlo a lo Vittorio & Luccino, hecho el modisto escogiendo que ponerle de ropa a su cuñado para la presentación o buscando de prisa y corriendo quién le planche de última hora una camisa al artista en algún pueblo remoto y dejado de la mano de Dios.
Y ni se diga cuando llega a un aeropuerto y debe estar al tanto del equipaje del más grande del vallenato. Su delgadez contrasta con los ingentes y oficiosos esfuerzos que hace para que las cosas salgan lo mejor posible.
Si hay alguien que ha escuchado pretextos, razones, consejos y cuanta vaina la mente humana invente o disponga para buscar sus fines, entre ellos, para acercarse a Diomedes Díaz ese es Diego Martínez.
No es raro que le toque pasar la mayor parte del tiempo haciéndose “el caído del zarzo” -por no decir otra cosa que empieza por h y termina en von- para evitar la incesante, tremenda e inclemente presión que el entorno del artista recibe por parte de miles de personas que, motivadas por las más coherentes razones o más atropelladas excusas, se las ingenian para estar al lado del ídolo de ídolos.
Por eso usa la rigurosa ciencia de quitarse de encima a todo quien se acerque a pedir algo que él crea no vaya en dirección a lo que interese o sirve, entre otras vivencias, como la del periodista aquel al que le ha dado más de 10 veces su número telefónico cambiándole una cifra o invirtiendo los números para despistarlo.
-“Jajaja... compadre si no es así ¿quién aguanta semejante vaina”, dijo.
-"Ya, mañana te envío a cualquiera de esos números las fotos que me pediste y que tomé con la cámara de un celular que tengo hace 10 años... ve que las esperes...", le dije.
-"Ya, mañana te envío a cualquiera de esos números las fotos que me pediste y que tomé con la cámara de un celular que tengo hace 10 años... ve que las esperes...", le dije.
¡¡Saludos, chamo!!. HS.
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(Nota: El autor de estas líneas ha de agradecer a todos y cada uno de los integrantes de la agrupación de Diomedes Díaz y al artista mismo y, entre ellos, a Diego Martínez la diligencia en el trato y el respeto hacia el trabajo periodístico. No es un cumplido por quedar bien es un sentimiento sincero. Dios los bendiga. HS).
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(Nota: El autor de estas líneas ha de agradecer a todos y cada uno de los integrantes de la agrupación de Diomedes Díaz y al artista mismo y, entre ellos, a Diego Martínez la diligencia en el trato y el respeto hacia el trabajo periodístico. No es un cumplido por quedar bien es un sentimiento sincero. Dios los bendiga. HS).
INSTANTÁNEAS CON EL CACIQUE
EN MÉXICO
(NOTA: En este video es el que tiene la tableta en la mano y esta junto al cantante y viste chaqueta blanca, bordes rojos)
EN ARUBA
(NOTA: Es la persona de negro que da la espalda al público, de frente al Cacique).
EN ARUBA
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| En el aeropuerto de Bogotá. |
EN MONSERRATE, BOGOTA.
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| En familia, al centro. |
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| Escoltándolo |
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| ...El 'moderno' teléfono, por aquí se trasmitirán las fotos... ............. |
REDACCIÓN, REPORTERÍA, FOTOS Y CONCEPTO PERIODÍSTICO: Héctor Sarasti. GESTIÓN DE REDES SOCIALES: Antonio José de León. DIRECTOR ORGANIZACIÓN MUSICAL DE DIOMEDES DÍAZ: José Zequeda. Agosto del 2013
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